jueves, 27 de febrero de 2014

EDGAR ALLAN POE

EDGAR ALLAN POE
1809 - 1949

ANNABEL LEE

Sucedió hace muchos, muchos años
en un reino junto al mar.
Alli vivía una doncella conocida
por el nombre de Annabel lee.
y esa doncella no vivía con otro pensamiento
que el de amarme y que yo la amara.

Yo era un chiquillo y ella una chiquilla,
en aquel reino junto al mar:
Pero nos amábamos con un amor
que era más que amor
-mi Annabel Lee y yo.
Con un amorque los alados serafines del cielo
envidiaban de nosotros.

Y éste fue el motivo por el que hace mucho tiempo
en aquel reino junto al mar,
un viento llegó desde una nube, helando
a mi hermosa annabel Lee:
entonces vino aquel hidalgo pariente suyo
y la apartó de mi lado,
para encerrarla en un sepulcro
en aquel reino junto al mar.

Los ángeles que no eran tan felices en el cielo,
nos tenían envidia
-¡Si!- éste fue el motivo (como toda la gente sabe,
en aquel reino junto al mar)
para que el viento viniera por la noche desde la nube,
helando y matando mi Annanel Lee.

Pero nuestro amor era mucho más fuerte que el amor
de aquellos que eran más viejos que nosotros
-de muchos que sabían más que nosotros-
y ni siquiera los angeles allá arriba en el cielo,
ni los demonios en las profundidades del mar
podrán nunca separar mi alma del alma de la hermosa Annabel Lee.

Jamás brilla la luna sin que yo sueñe
con la hermosa Annabel Lee;
y así, durante toda la noche, permanezco tendido al lado
de mi querida, mi querida, mi vida y mi novia,
allá en el sepulcro junto al mar
en su tumba junto al mar sonoro.

UN SUEÑO DENTRO DE UN SUEÑO

¡Toma este beso en tu frente!
Y, en el momento de abandonarte,
déjame confesarete lo siguiente:
no te equivocas cuando consideras
que mis días has sido un sueño;
y si la esperanza se ha desvanecido
en una noche o en un día,
en  un visión o fuera de ella,
¿es por ello menos ida?
Todo lo que vemos o parecemos
no es más que un sueño en un sueño.

Yo permanezco en el rugido
de una ribera atormentada por las olas,
y aprieto en la mano
granos de arena de oro.
¡Qué pocos y cómo se escurren
entre mis dedos al abismo,
mientras lloro, mientras lloro!
¡Oh Dios!, ¿No puedo yo estrecharlos
con más ceñido puño?
¡O, Dios!, ¿no puedo salvar
ni uno, de la despiadada ola?
¿Todo lo que vemos o parecemos
no es más que un sueño dentro de un sueño?
}

1 comentario:

  1. Una vida atormentada, ausencia del amor de su vida, poeta de enorme sensibilidad que, al perder a su amor
    lo sumió en profundas depresiones, la necesidad de cariño, de sentirse acompañado, lo llevaron al consumo de alcohol que tampoco le ayudó. Tanto dolor, tanta amargura, lo impulsan a escribir relatos de terror que para muchos son inolvidables. Corta vida de un gran poeta.

    Diego de la Noche

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